Me he dado cuenta de que esto del blog tiene algo de diario y algo de tesis. Empecé a escribirlo para compartir las cosas que iba “descubriendo” en mi curioseo sobre política municipal. Pero, al contrario que en un trabajo académico, uno no espera al final para publicar sus discutibles "hallazgos", sino que comparte, imprudente, cada paso, cada dato, y cada conclusión provisional a la que va llegando. Los nuevos planteamientos desplazan a los anteriores sin borrar su rastro. El resultado es, con el tiempo, probablemente el mismo. Aunque el proceso personal de aprendizaje adquiere un mayor protagonismo y las conclusiones se presentan de una forma mucho más caótica. A veces, después de una semana, uno se da cuenta de que poco matizados fueron sus comentarios anteriores. En otras ocasiones se corre el riesgo de escribir aparentes “obviedades” simplemente porque, para todo investigador, las definiciones, los presupuestos, tienen que ser recogidos y explícitos. Es incluso posible que reflexiones como ésta broten a modo de disculpa, no tanto por lo hecho como por lo que falte por hacer.
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