martes, 28 de noviembre de 2006

Música en Vivo y Horarios de Cierre


En todas las ciudades de España existen muchos grupos de músicos aficionados que, aunque perfectamente capaces de amenizar cualquier “velada” con la complacencia del público, no encuentran una demanda suficiente de actuaciones en vivo que les permita dedicarse a ello profesionalmente. La razón es fácil de entender: desde un punto de vista estrictamente económico a la mayor parte de los propietarios de locales nocturnos les resulta más beneficioso programar su ordenador con las últimas novedades en mp3. Sin embargo el interés de los propietarios de locales no tiene porque coincidir con el interés de la sociedad en su conjunto. En un post anterior resaltaba la creciente importancia económica de las industrias culturales, de las cuales la música es una de las más relevantes. Pero difícilmente fomentaremos la creatividad musical y la aparición de nuevos y buenos profesionales de la música si no existe un mercado suficiente que les permita subsistir en sus inicios. La cuestión es ¿cómo podemos estimular dicha demanda sin decir a los empresarios como deben gestionar su local y sin recurrir permanentemente a las subvenciones? Una posible solución sería ligar de manera efectiva los horarios de cierre a la programación de música en vivo, de forma que aquellos locales que ofreciesen este tipo de espectáculos, aunque no fuese más que un par de días por semana, pudiesen disfrutar de unos horarios más amplios. Esto introduciría una discriminación positiva a favor de los locales con actuaciones musicales que les compensaría por los mayores costes de esta actividad. Es cierto que en términos generales, y por pequeña que fuese, la medida supondría una carga para el sector, pero viendo la expansión de la que se ha beneficiado en los últimos años no me parece que resulte demasiado preocupante, especialmente si tenemos en cuenta que se trata de una actividad regulada que disfruta en cierto grado de beneficios extraordinarios como consecuencia de una competencia en buena medida limitada por las licencias ya concedidas. Como contrapartida los beneficios podrían ser importantes, se estimularía la creatividad y la industria, pero también la aparición de una nueva oferta de ocio, susceptible de identificarse con una ciudad o región determinada y de constituirse en un importante factor de atracción y diferenciación cultural y turística. Evidentemente la cuestión “siempre” es más compleja, pero no me parece una idea descabellada.

4 comentarios:

ivan dijo...

Sabes que existe en la ley de espectáculos públicos una tipología de establecimiento que se llama café teatro y otra salas de fiesta con espectáculos o pases de atracciones con un horario más amplio que los bares, cafeterías, pubs, etc. pero que aunque algunos tienen esa tipología solo aplican la parte que les interesa: abrir hasta más tarde y vender copas, sin que nadie les pregunte donde están las actuaciones. Deberíamos de ser más rigurosos en este asunto.

Francisco Blanco dijo...

Cierto, seamos más rigurosos en la aplicación de la ley para que ésta valga para algo, 100% de acuerdo

Basile v.d. Drop dijo...

Yo creo que al margen de la regulación existente y de las diferentes tipologías de establecimiento ya recogidas, se podría dar la opción, bajo la premisa de cumplir ciertos requisitos tales como insonorización,seguridad, espacio,...etc, y con la consecuente licencia municipal,bajo la forma que se estime conveniente,de que los establecimientos que estén dispuestos puedan ofertar este tipo de espectáculos musicales a los que haces referencia. Creo que mejoraría la calidad de la oferta, se puede establecer "otra forma de salir" y como bien dices, se fomenta el desarrollo de los grupos locales. A mí me parece una buena idea. Evidentemente habría que establecer unos mecanismos de control para evitar la picaresca. Podemos utilizar el multamóvil...ya se sabe, polivalencia...

Anónimo dijo...

Yo creo que una posible solución sería ligar, como ya se hace en algunas ciudades, los espectáculos "deportivos" al comienzo de las actuaciones, es decir, después de cada partido de champions o de fórmula quinta,....trash.....actuación, a la hora que sea, sin falta de ampliar los horarios de los locales. ¿Habría que subencionar el pago de las cuotas de canales de pago a los locales que sigan este criterio? Es posible. Pero ya lo dice basile v.d. drop: polivalencia, usar el multamóvil para evitar otra forma, yo creo que más que de salir, de no-salir.Por cierto, ¿incumplen la ley de café teatro o la de sala de fiesta con espectáculo todos estos gaiteros chillones, acordeonistas, músicos de clásica con cassette, tangeros, banda de música municipal,cantautores con perro, tamborileros ...... que atronan diariamente en cualquier calle? ¿o son las actuaciones de esos bares a los que nadie les preguntan dónde están? Multamóvil también para los anteriores, quiero decir, ambivalencia, en el sentido de un estado de ánimo, transitorio o permanente, en el que coexisten dos emociones o sentimientos opuestos, como el amor y el odio, odio hacia los atronantes y amor hacia los héroes que todavía programan actuaciones en directo, a la hora que sea.